Contra Vigilancio
San Jerónimo
"Contra Vigilancio" es una obra polémica escrita por San Jerónimo alrededor del año 409, dirigida contra Vigilancio, un sacerdote galo que criticaba la veneración de las reliquias y la vida monástica. En este tratado, Jerónimo defiende la legitimidad del culto a los santos y la eficacia de la intercesión de los mártires, argumentando que, si los apóstoles oraban por los vivos, con mayor razón los santos en el cielo pueden interceder por nosotros. La obra también aborda la importancia del celibato y la vida ascética en la Iglesia.
La obra "Contra Vigilancio" es fundamental para comprender las prácticas devocionales y ascéticas de la Iglesia primitiva, así como las controversias teológicas de la época. Para el lector católico, este tratado ofrece una defensa sólida de las tradiciones que aún son relevantes en la espiritualidad contemporánea. La obra destaca la importancia de la intercesión de los santos y la vida monástica como medios para alcanzar la santidad y la salvación.